a Asamblea General de las Naciones Unidas, reunida este día, aprueba “por abrumadora mayoría y ningún voto en contra, la Resolución 2065, que dejaba constancia del conflicto de soberanía planteado” por las islas Malvinas y constituye “el mayor éxito diplomático argentino” en esa disputa territorial con el Reino Unido (Felipe Pigna. Revista Viva. Buenos Aires, 21/4/2013).
La resolución -que obtuvo 94 votos a favor y 14 abstenciones- “invita a los Gobiernos de la Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte a proseguir sin demora las negociaciones recomendadas por el Comité Especial encargado de examinar la situación con respecto a la aplicación de la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales a fin de encontrar una solución pacífica al problema, teniendo debidamente en cuenta las disposiciones y los objetivos de la Carta de las Naciones Unidas (…) así como los intereses de la población de las Islas Malvinas (Falkland Islands)”.
Además “pide a ambos Gobiernos que informen al Comité Especial y a la Asamblea General (…) sobre el resultado de las negociaciones”.
Este importante logro pudo plasmarse en un contexto internacional favorable a la descolonización. La situación mundial estaba marcada por la Guerra Fría, signada por la disputa entre Estados Unidos y Unión Soviética, agravada por la Guerra de Vietnam, la reciente Revolución Cubana y la liberación de las colonias, sobre todo las africanas.
El gobierno argentino, presidido por Arturo Illia, desplegó una intensa campaña de reivindicación de la soberanía en las islas del Atlántico Sur. La Cancillería fue “logrando que los integrantes del subcomité de la ONU encargado de la cuestión se alineara con nuestra postura. También presionaron con éxito para que la representación británica (…) se sentase a participar de las sesiones”.
El discurso en la Asamblea del representante ante la ONU, Bonifacio del Carril planteó que Argentina “jamás ha considerado a las Islas Malvinas como un territorio colonial. Las ha considerado y las considera como una colonia establecida por Inglaterra en un territorio usurpado, que pertenece a la República Argentina”.
En tanto, el canciller Miguel Zavala Ortiz denunció la “administración ilegítima que el Reino Unido (…) ejerce sobre una parte integrante de nuestro territorio nacional, ocupado por la violencia” (op.cit.).
