l empresario de la construcción Marino Luis Vaquera, demandó al Municipio de Río Grande, por la desadjudicación de un terreno que le fue otorgado en el parque industrial, con la finalidad de llevar adelante un emprendimiento, pero el Superior Tribunal de Justicia avaló la decisión que adoptó el organismo oficial.
Los jueces Ernesto Löffler, Javier Muchnik y Carlos Gonzalo Sagastume, y las juezas María del Carmen Battaini y Edith Miriam Cristiano rechazaron la demanda contencioso-administrativa contra la Municipalidad, por el cual se pretendía que se revoque el decreto municipal 493/2021, notificado el 7 de julio de 2021, por el cual fue desadjudicado el terreno.
La sentencia fue dictada en acordada del 23 de abril, en el expediente 4321/21, caratulado "Vaquera, Marino Luis c/Municipalidad de Río Grande s/ Contencioso Administrativo", de la Secretaría de Demandas Originarias.
En el voto del juez Ernesto Löffler, se consigna que el empresario “debía cumplir con ciertas acciones una vez notificado del acto de adjudicación precaria, corno ser la presentación del proyecto definitivo, el cronograma de las obras civiles, los planos aprobados e identificación de la fecha tentativa de puesta en marcha de las actividades, todo ello dentro del plazo de noventa (90) días corridos y este plazo vencía el 12 de marzo de 2020”.
El terreno que fue recuperado por el Municipio está ubicado en la calle Sarmiento 3621, con una superficie de 3.839,46 metros cuadrados. En ese sitio Vaquera se había comprometido a llevar a cabo la fabricación de premoldeados de hormigón de diversos tipos, como ser cámaras redondas, cuadradas para redes de cloacas y pluviales, cañerías de gran diámetro para alcantarillas, paneles para viviendas losetas, postes, nichos de gas, bloques, adoquines, y también para ser utilizado como depósito de cañerías, materiales de construcción y maquinarias propias, entre otras cuestiones.
Para avalar el decreto de desadjudicación, el Superior Tribunal tuvo en cuenta que un acta de inspección de la Dirección de Ambiente de fecha 12 de mayo de 2021, de la que surge que el terreno adjudicado se encontraba en condición de baldío, sin cerco perimetral.
Además, se consigna la existencia de un acta de notificación 77/2021 con fecha 17 de mayo de 2021, donde se lo intima a aportar y alegar pruebas respecto a los incumplimientos constatados, pero Vaquera no realizó presentación alguna en el plazo indicado.
Cabe señalar que el predio, al momento de ser desadjudicado, se encontraba totalmente baldío, y que nueve meses después (en abril de 2022), Vaquera fue encontrado realizando movimientos en el predio fiscal sin potestad alguna, en lo que se consideró un “obrar malicioso”. Por este motivo se hizo una constatación con escribano público, se le dirigió carta documento y se lo intimó a abstenerse de realizar cualquier actividad.