n medio de la conmoción que se vive en Tierra del Fuego a raíz de la decisión del Gobierno nacional de reducir los aranceles a la importación de celulares y la quita de impuestos internos para productos como aires acondicionados, hay actitudes que no pasan inadvertidas. Dentro y fuera de la Provincia.
Por caso, el llamativo silencio que ha mantenido hasta ahora la Unión Industrial Fueguina, (UIF) vinculada al Grupo Mirgor, que como entidad no ha dado a conocer su opinión como así tampoco ninguno de sus referentes. “Un silencio que aturde”, remarcan desde algunos sectores vinculados a la industria.
Contrariamente, la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE), que conduce Rubén Cherñajovsky, dueño de Newsan, ha hecho pública su preocupación sobre la quita de aranceles a los dispositivos móviles.
Por el lado de la UIF, su director ejecutivo Ramiro Caballero –quien ocupara el cargo de ministro de Industria durante la administración de la gobernadora Rosana Bertone- no ha realizado ningún tipo de declaración. Un sugerente silencio al que también se han sumado, directivos de Mirgor, como Juan Donald, vicepresidente del grupo.
El contraste es notorio. A manera de ejemplo se pueden mencionar las declaraciones de Luis Galli, CEO de Newsan. "Esto es un golpe duro –manifestó días atrás el ejecutivo, en el marco del Congreso del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas-. Tengo que entender bien cuando salga la reglamentación, el decreto y la resolución, pero si es como está planteando, la reducción a cero de derechos en celulares, va a ser muy difícil competir".
Por el lado del Gobierno fueguino, fuentes allegadas al gobernador Gustavo Melella han dejado trascender primero la sorpresa y en segundo lugar el enojo que causó el silencio de la UIF.
En el seno de la administración provincial existe la seria sospecha de que hay un arreglo –o una negociación ya encaminada -por debajo- entre algunas empresas y el Gobierno nacional. Una de las empresas señaladas sería precisamente del Grupo Mirgor.
La duda está planteada: ¿cuál va a ser la reacción de la UIF y el Grupo Mirgor si el Gobierno nacional no da marcha atrás con las medidas anunciadas por el vocero Manuel Adorni? ¿Recurrirán también a la Justicia reclamando alguna acción de amparo?
Habrá que dar tiempo al tiempo para despejar de fantasmas los posicionamientos o en su defecto poner blanco sobre negro y ver cómo caen las máscaras en este carnaval en el que los fueguinos fuimos incluidos caprichosamente.
(*) El Comité Editorial está conformado por un grupo de periodistas de EDFM. El desarrollo editorial está basado en su experiencia, investigación y debates sobre los temas abordados.
