os valientes soldados en Ushuaia conmemoran cada 25 de Mayo entre nieve y temperaturas dignas de un pingüino con bufanda. Mientras, el Gobierno nacional anunció su plan para revisar los subsidios al gas en las llamadas "zonas frías". ¿Coincidencia? Quizás sea un llamado a "enfriar" también los festejos patrios.
La lógica es impecable: si en Ushuaia se puede bailar el pericón nacional con -5°C, ¿realmente necesitamos subsidios para la calefacción? Después de todo, el espíritu revolucionario de 1810 no incluía Caloramas. Eso sí, habrá que ver cómo se las arreglan los próceres de hielo el año que viene cuando, además de soplar velitas patrias, tengan que soplar sus manos para no congelarse.
Mientras tanto, el Gobierno se enfoca en "optimizar" ayudas: alguien con más de un medidor a su nombre, sospechosamente deja de ser "vulnerable" y pasa a ser un "emprendedor del invierno". Eso sí, en Ushuaia seguirán dando el ejemplo: patriotismo puro, sin calefacción subsidiada. ¡Viva la Patria, aunque sea a tiritones!