l Doctor Gonzalo Contreras, anestesiólogo y miembro de la comisión directiva de la Asociación de Anestesiólogos llevó tranquilidad a la población fueguina en relación al fentanilo luego de que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica prohibiera el uso de un lote específico de una marca determinada, que contenía bacterias. “Si existiese algún lote, que no pasó acá en Tierra del Fuego, pero si existiese la droga en cuestión que estaba contaminada ya se descartó”, sostuvo el entrevistado en comunicación con FM Ushuaia.
El fentanilo es una droga sintética y está dentro del grupo de fármacos denominados opioides, que derivan del opio. La droga madre de este grupo es la morfina. El fentanilo es 50 a 100 veces más potente para el tratamiento del dolor que la morfina. “Es una droga bastante potente que se usa en ámbitos hospitalarios, desde adentro de un quirófano hasta el tratamiento de un paciente que necesita sobrellevar alguna patología que conlleva dolor”, explicó el Anestesiólogo.
Recordó que la ANMAT, a principios de este año, detectó un lote, en un laboratorio, contaminado con unas bacterias. “No es que el fentanilo se prohibió sino que se prohibió específicamente el uso de este lote de este laboratorio”, subrayó. “El fentanilo es una droga que se usa en toda la Argentina y en todo el mundo. El problema no va por una cuestión del fentanilo en sí sino por el lote y el laboratorio este que por equis motivo se contaminó y el líquido dentro de la ampolla tenía una bacteria y eso produjo la infección de ciertos pacientes que recibieron esa droga de ese laboratorio y de ese lote”, añadió.
Con respecto a cómo se advirtió la contaminación del fentanilo, Contreras señaló que “se dieron cuenta por patologías que comenzaron a presentar pacientes que no las estaban padeciendo, por ejemplo pacientes que estaban siendo tratados por dolor empezaban con cuadros febriles y hacían una neumonía atípica”. Además, mencionó que las muertes de los pacientes no fueron repentinas. “Son pacientes que si van a recibir este tipo de tratamiento por una patología de base, por ejemplo una neoplasia, están inmunodeprimidos y son muy propensos a tener las defensas bajas. Esto hace que una bacteria encuentre un terreno propicio para su crecimiento y su máxima expresión en la enfermedad, entonces eso puede llevar al desencadenante fatal que en este caso fue la muerte de estos pacientes”, expuso.
En torno a los procedimientos efectuados tras la alerta, el especialista contó: “Recibimos las alertas pertinentes de la ANMAT y de la Federación Argentina de Anestesia, que nos indicaban el laboratorio y el lote de esta droga. Nosotros en nuestra provincia, y en todas las provincias de la Argentina, chequeamos en el stock a ver si teníamos drogas de estas características, hablando del laboratorio y el lote, y si las pudiésemos tener lo denunciábamos y se devolvían para sacarlas de circulación”.
Por otra parte, dijo que el uso habitual de este tipo de fármacos es más bien institucional. “Estos no se recetan, no se compran en la farmacia; se manejan en las clínicas, en los sanatorios, en los hospitales, con la indicación médica”, resaltó.
Sobre el uso más común del fentanilo, comentó que se podría usar en una terapia intensiva cuando hay que colocar un respirador artificial porque los opioides en general, no solo el fentanilo, ayudan a la adaptación del paciente con respecto al respirador mecánico. “Se usan los opioides en terapia intensiva, el fentanilo en particular no, se pueden usar varios tipos de opioides, no quiere decir que siempre se va a usar el mismo”, mencionó.
Por último, fue consultado sobre quiénes son los profesionales que están facultados para aplicar fentanilo. “Los opioides, y en particular estos fármacos que son tan potentes, la mayoría de las veces son usados dentro de las instituciones y los aplicamos más que nada los anestesiólogos porque se usan también en el momento quirúrgico del paciente pero no somos los únicos, se usan también en la terapia intensiva y en algunos casos muy particulares los puede usar un médico que hace cuidados paliativos en algún paciente internado”, cerró.