l presidente del Concejo Deliberante, concejal Juan Carlos Pino, a propósito de la situación extrema que presenta el relleno sanitario de la ciudad, al borde del colapso, acentuó sobre la necesidad cada vez mayor de promover la ampliación del ejido urbano, que contemple algún nuevo sector para la instalación de otro espacio para los residuos urbanos.
“Hace muchos años que veníamos planteando la ampliación del ejido urbano, creo que es la solución a muchos problemas dentro de la ciudad”, planteó el edil justicialista, denotando además que la falta de tierra no solamente afecta al estado municipal y al provincial, sino que “ni la parte privada tiene tierra para la demanda habitacional”.
En cuanto al actual relleno sanitario en sí, lo consideró “otro de los problemas que tenemos desde hace mucho tiempo”, reparando que el actual está en el límite de la ciudad, ya dentro de jurisdicción de la provincia. “Eso indica la dimensión de la falta hoy de ampliación del ejido urbano” insistió.
La demanda habitacional que, según Pino, se resolvería con la reclamada ampliación del ejido urbano, se debe proyectar en “un circuito económico habitacional, de emprendimiento productivo, turístico, que le dé un margen a la ciudad por los próximos 20 o 30 años”.
A su entender, hoy “la cuarta generación de fueguinos está en grave problema, porque no van a tener a futuro solución habitacional. Si no, tenemos que modificar el código de planificación urbana y establecer otro parámetro que tiene que ver con la altura de los edificios”, planteó.
Relleno sanitario, una playa de estacionamiento, una terminal de ómnibus, son necesidades que “vienen desde hace años y nunca han tenido una solución, porque siempre la prioridad fue la solución de la demanda habitacional”.
Por eso apeló a “pensar un poquito más allá”, en tanto la ampliación del ejido urbano se remite a las futuras generaciones. “Hoy el gran problema que tenemos dentro de la ciudad es que, en un predio de 300 m2, tenemos dos o tres viviendas, porque muchas familias optaron por la solución habitacional dentro de su predio, cediéndole a un hijo parte del predio para que haga un departamento, una casita”.
Retomando el problema particular del relleno sanitario, aun cuando se ampliara una celda para una duración de unos cuatro años más, “hay que buscar una alternativa”, y mencionó el antecedente de un proyecto de integración con Río Grande y Tolhuin, de comienzos del año pasado, “que quedó ahí y que sin duda sería una de las soluciones centralizar las tres ciudades en un relleno sanitario provincial”.
Juan Carlos Pino no se manifestó convencido con el proyecto de ampliar el ejido urbano hasta estancia Remolino, en tanto “no es solución para nuestra ciudad”. Señaló que su aspiración es que el proyecto que se trate en la Legislatura, preferentemente este año, “debería ser el que unifica la ruta de la costa con la ruta J, porque eso le da una perspectiva a futuro de crecimiento a la ciudad, juntando las tres rutas, generaría un circuito económico, turístico, habitacional, incluso de emprendimientos en la zona de Almanza”.
En cambio, ampliar hacia estancia Remolino y no tener continuidad de la ruta, “tampoco tiene ningún sentido, porque si no, lo único que se estaría ostentando es cobrar impuestos sobre la ruta 3, nada más, porque no hay lugares visibles como para generar soluciones de demanda habitacional” concluyó el presidente del Concejo ushuaiense.
