l legislador provincial por la Unión Cívica Radical, Federico Sciurano, propuso varias líneas de trabajo tendientes a reforzar, promover y desarrollar iniciativas sobre el sector costero de la provincia, en tanto única en el país con territorio delimitado en un 100% por la costa.
Al respecto, Sciurano recordó la presentación de un proyecto de Ley sobre costas protegidas, y otro sobre macroalgas. Y pidió tener en cuenta que la Legislatura tomó la decisión de avanzar notoriamente en la materia, cuando después de más de 30 años sancionó la ley de protección de península Mitre.
Además, cuando ejerciera como intendente de Ushuaia “llevamos adelante la comisión de conservación de la costa de la ciudad. Hicimos un enorme trabajo de recuperación de la costa, porque entiendo el valor que tiene para una ciudad que vive de frente al mar”.
Consideró que las iniciativas parlamentarias presentadas son “herramientas que le van a permitir a Tierra del Fuego identificar la potencialidad que genera el recurso costa. Todo nuestro vínculo con la industria turística justamente está orientado a lo que nos permite la costa y el lugar geográfico en el que vivimos”.
Señaló que lo que pasa en nuestra provincia ocurre en el resto del planeta. “Las ciudades costeras tienen un valor distinto a las mediterráneas, eso obviamente a nosotros debe obligarnos a reconocer la necesidad de preservar ese recurso, porque de la misma manera que te puede permitir desarrollo económico, si no lo cuidas, el impacto es totalmente contrario a eso”.
En tal sentido identificó una posibilidad y una herramienta, y propuso “seguir remando para ver si efectivamente leyes de estas características prosperen en la Legislatura” en caso de acceder a un nuevo mandato luego de las elecciones del próximo domingo, que lo encuentran en busca de la reelección encabezando la lista de Forja.
Sciurano aludió al caso de las salmoneras, cuya instalación en la provincia fue vedado a instancias de la propia comunidad. Explicó que en caso de haber permitido las salmoneras “hubiera impactado en el corazón de la actividad turística, que genera trabajo para casi 20.000 personas y las salmoneras hubieran generado trabajo para apenas 100”.
Distinguió a la pandemia como el momento en que “nos dimos cuenta de lo que el turismo genera en Ushuaia particularmente”. Consignó el caso de gente que pensó que su actividad comercial no dependía del turismo, y que “se dieron cuenta que ese cliente que le va a comprar a la despensa del barrio, va con el recurso que gana atendiendo a los turistas”.
En términos de herramientas y ámbitos adecuados para un trabajo vinculado entre el desarrollo costero, la protección del lugar y el factor turístico, Federico Sciurano consignó que claramente “la Agencia de Desarrollo es un espacio exitoso que ha permitido la mirada estratégica sobre la posibilidad de generar recurso económico, que eso genera después empleo”.
Consideró que buena parte de la consolidación de la actividad turística en Ushuaia viene en esa línea. Y rememoró el trabajo con la agencia “cuando decidimos abrir el mercado brasilero. Toda la actividad que nosotros desarrollamos en Brasil lo hicimos en sociedad con la agencia, razón por la cual ha demostrado ser una experiencia exitosa”.
“Evidentemente la dinámica de la provincia es distinta de la ciudad, pero se puede tomar como primer ejemplo lo que ha generado Ushuaia Buró y tratar de encontrar un espacio mixto público-privado, que sea un espacio de trabajo, no de catarsis. V amos a estudiarlo un poco, estaría bueno pensarlo para lo que tenemos hacia adelante” se planteó al respecto.
Basado en su conocimiento tanto del ámbito privado como el público, se mostró optimista en cuanto a abordar “uno de los grandes desafíos de poder construir esos puentes que permitan potenciar estos dos mundos. El Buró es un caso de esos donde el Estado ha logrado complementarse con el privado y poder desarrollar estrategias conjuntas, con una mirada mixta de inversión” volvió a elogiar.
Por lo mismo, convocó a subsanar el problema que se plantea cuando “el sector público codifica de una manera y el sector privado de otra. Muchas veces, cuando el sector público quiere decir una cosa, el sector privado está recibiendo otra, y ahí hay desconexión. Hay que conocer esas dos realidades, porque en definitiva el objetivo del Estado es potenciar el sector privado, sino no tiene razón de ser”.
En esa línea de pensamiento, Federico Sciurano concluyó su intervención postulando que “la única posibilidad de que la gente consiga empleo, es que el sector público haga de plataforma de despegue, para que el sector privado pueda invertir y generar riqueza, que implica generar empleo”.
