a Dra. Verónica Baró, referente de LUCCAU (Lucha Contra el Cáncer Ushuaia) se mostró satisfecha con la repercusión que ha tenido el comienzo de la campaña que busca aumentar los socios activos de la institución.
“Ya se ha acercado mucha gente a colaborar y hacerse socia. LUCCAU es una asociación sin fines de lucro que desde los inicios siempre tuvo socios aportantes. Esos socios pagan una cuota mensual. Hoy el mínimo es de mil pesos y a partir de ahí lo que la persona desee y pueda colaborar. Se anota como socio, se le piden sus datos personales y se le da la facilidad de pagarlo con una tarjeta de débito o de crédito”, informó. “Hace mucho tiempo, cuando la institución recién empezaba las voluntarias iban a las casas a cobrar las cuotas. Quizás eso hacía que los socios permanecieran con el contacto directo de la gente de la asociación pero hoy en día las cosas cambiaron, hay facilidades para poder aportar. También las puertas de LUCCAU están abiertas para quien quiera ser voluntario con algún otro tipo de colaboración”, agregó.
“Hoy tenemos menos de cien socios. Nuestro objetivo sería llegar a los 500 socios. Si uno tiene 500 socios que aporten lo mínimo realmente es una entrada fija por mes que nosotros podríamos destinar para una cuestión fija también o para alguna campaña. Este año, especialmente, nos va a venir muy bien todo tipo de aportes”, remarcó.
Baró facilitó un número de WhatsApp 2901582533 a través del cual las personas pueden enviar mensajes de texto para solicitar turnos o información.
Por otra parte, la doctora ponderó las propuestas que se dan en la asociación para procurar el bienestar de los pacientes. Desde hace varios años LUCCAU está implementando un voluntariado a partir de un acuerdo firmado con la fundación “Donde quiero estar”, de Buenos Aires. “Hemos hecho un convenio para hacer actividades con pacientes en la sala de quimioterapia y también fuera de la sala con pacientes en tratamiento”, manifestó.
Recientemente se puso en marcha un nuevo proyecto, que se desarrolla los lunes, a las 15 horas, con un voluntario que es profesor de Yoga y también hace Reiki y meditación. ”Va a estar a disposición para los pacientes que quieran tomar este servicio que es gratis y que aporta mucho a la calidad de vida y a los tratamientos”, acotó.
“Los jueves se van a alternando otro tipo de actividades como maquillaje para las chicas en quimio, alguna actividad de lectura. En la misma sala de quimio hay una voluntaria que hace Reflexología”, comentó y dijo que a través del trabajo en red con otras fundaciones se van incorporando actividades para ayudar al paciente oncológico. “Los voluntarios son de acá pero el asesoramiento, el seguimiento y la forma de cómo se hacen las cosas viene desde una fundación que ya tiene muchos años de experiencia en todo el país”, concluyó.