na vez más hemos demostrado la poca seriedad con la que se manejan las cosas en nuestro sistema democrático. Ya sea por la ineficacia o por especulación política, vaya uno a saber, logramos sentar un nuevo precedente a nivel mundial. Podría tomarse como algo menor, pero fue la primera vez en la historia en la que un Presidente de la Nación reconoce una derrota sin que estén los resultados oficiales de un proceso electoral. En fin, situaciones que únicamente pueden pasar en nuestro bendito país.